¿Cómo puedo probar un despido injustificado?
Para probar que un despido ha sido injustificado, esto debe ser realizado en un juicio, ofreciendo al tribunal cualquier medio de prueba que genere la convicción necesaria para probar los hechos que se alegan, la prueba debe ofrecerse en el momento procesal correspondiente para que luego sea posible incorporarla en el juicio a fin de que el tribunal la pondere al momento de dictar sentencia, por lo que es importante tener en cuenta los medios de pruebas que se utilizaran en el procedimiento antes de presentar una demanda.
En nuestra legislación laboral rige el principio de la libertad de la prueba, esto quiere decir, que es posible utilizar cualquier medio de prueba, esté contemplado expresamente en la ley o no, con el objetivo de probar un hecho que esté relacionado directamente con los hechos discutidos en juicio.
Por lo tanto, a modo de ejemplo, sería posible utilizar como medio de prueba documentos tales como un contrato de trabajo, fotografías, chats de WhatsApp, archivos de audio, también podría utilizarse prueba testimonial, prueba confesional, prueba pericial, exhibición de documentos, etc. Lo importante es que sea un medio probatorio apto para convencer al juez.
Para ejemplificar de manera concreta podemos señalar un caso de despido injustificado por incumplimiento grave de las obligaciones del contrato, para la cual para probar que este no ha sido grave o que derechamente no haya sucedido, se podría utilizar como prueba el contrato de trabajo para saber cuáles son aquellas obligaciones, la carta de despido, en la que consta la causal que se le imputa al trabajador, solicitar prueba confesional, o testigos como clientes u otros trabajadores o ex trabajadores de la empresa, a fin de corroborar por medio de sus declaraciones los hechos que se alegan, también podría solicitarse la exhibición de documentos que estén en poder del empleador y que den cuenta de la conducta del trabajador.
Otro caso típico es el caso del despido injustificado, es el del despido por necesidades de la empresa, el cual se podría probar mediante la carta de despido, que en muchas ocasiones es genérica, y también solicitando que se exhiban documentos que den cuenta del estado financiero de la empresa, solicitar la absolución de posiciones y la prueba testimonial con el objetivo de corroborar que el despido ha sido por razones personales y no objetivas, que el puesto de trabajo no ha sido suprimido, o que las funciones del trabajador han sido traspasados a otro trabajador, etc.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que la libertad probatoria tiene algunas limitaciones. En primer lugar, la prueba debe ser pertinente, es decir que debe estar relacionada directamente con los hechos discutidos en juicio, ya que, de lo contrario, está será rechazada por el juez por ser impertinente.
Además, la prueba tampoco puede ser obtenida directa ni indirectamente por medios ilícitos que vulneren derechos fundamentales, lo que se conoce como prueba ilícita, por ejemplo, la prueba no podría ser utilizada en juicio si se ha obtenido una declaración mediante tortura. En este supuesto, el juez declarará que la prueba es inadmisible por ser ilícita y no tendrán ningún valor probatorio.
También se debe tener en cuenta que eventualmente la prueba ofrecida puede ser objetada por la contraparte por alguna de las razones ya mencionadas, ante lo cual, de acogerse aquella objeción, la prueba no podría ser incorporada en juicio.
Es muy importante señalar que, para el procedimiento monitorio, se deben presentar los documentos que sirvan para probar el despido injustificado al momento de presentar la demanda, ya que de lo contrario esta será rechazada por el tribunal por no contar el tribunal con antecedentes suficientes para dar una decisión favorable para el trabajador, sin perjuicio de que luego se pueda reclamar de esta resolución aportando nuevos antecedentes.